Detrás de la frescura del Giacinto y la dulzura de Caprifoglio están ocultos el amor y la ternura que florecen con el tiempo. Más que un lirio intoxicante y fascinante, este ramo es mucho más grande: lirios blancos, como los que un esposo ofrece a su esposa todas las semanas ... como los que Annick Goutal recibió del amor de su vida durante más de dieciocho años.