Las notas conflictivas del caramelo de sal marina son como una respiración armoniosa y tranquila, pero al mismo tiempo penetrantes y decisivas, de brisa refrescante, rota por unas pocas gotas de denso caramelo. Los minerales marinos y la pimienta rosa, combinadas con una dulzura máxima, evocan momentos despreocupados y te transportan mágicamente a un mundo donde no hay límites.