Como su firma original, el exceso de quirólogos de pase evoca el misterio y la sensualidad parisina. Concentrado al 30%, esta creación más multifacética despierta dependencia y delicadeza. El cacao se derrite con la frescura picante de la pimienta negra y el jengibre. Las voluptuosas notas de la pesca se combinan con la dulzura afrutada de la chutney de las manzanas de Cotogne y las flores de naranja. En el fondo, la esencia de pachulí y vainilla trae potencia y profundidad. Un camino intoxicante y atractivo.