La tela con notas suculentas de pera, almizcle suave y madera de cedro blanca, la leche, el almizcle es un perfume puro y tranquilizador. Ambroxan en el corazón evoca la suavidad de una caricia; Un abrazo suave como la cachemira, un mimos para darse a sí mismos que consuela el cuerpo y la mente.