Después de esos momentos en que el sol se besa un poco demasiado fuerte, llega el escaldón. Siempre hay alguien allí, para calmar el dolor y aliviar la molestia. Con el calor que se desvanece, el delicado cuidado que sigue transforma el dolor en un momento de intimidad, donde la curación y el afecto se hacen cargo.
Notas olfativas
Chile picante
Aloe vera
Té verde
Caléndula
Notas acuáticas