Tome una pequeña cantidad de producto y, utilizando la parte plana del cabello, continúe con la aplicación en toda la cara con movimientos horizontales, desde el interior hasta el exterior. Finalmente, use el cepillo superior para extender la textura en los puntos más difíciles, como los lados de la nariz y las esquinas del ojo. Para mantener la higiene y prolongar la duración de los pinceles, es posible limpiar las cerdas con un delicado detergente.