Opulento y magnético, Barroque rechaza el compromiso y abarca el drama olfativo. Con su poderoso y vibrante sendero, Barroque transforma a quienes lo usan en una obra de arte viva.
La inspiración: barroco siciliano
Nacido en el siglo XVII como una respuesta a la rigidez estilística de la época, el barroco siciliano representaba una rebelión creativa, una explosión de opulencia y dinamismo que transformaba la arquitectura, escultura y artes decorativas, infundiendo energía y teatralidad
cada detalle.
Mientras que el mundo se ajustaba a un estilo plano sin impulso, el barroco criado con irreverencia, exhibiendo formas irregulares, exageraciones escénicas y una abundancia de adornos que subvirtieron las reglas.
Entrando en el mismo espíritu poco convencional, el extracto barroco trae consigo el alma rebelde y grandiosa de esos tiempos.
Opulento y magnético, Barroque rechaza el compromiso y abarca el drama olfativo. Con su poderoso y vibrante sendero, Barroque transforma a quienes lo usan en una obra de arte viva, capaces de desafiar la banalidad y dejar una impresión indeleble.
Barroque es la expresión olfativa de una era en la que el arte se atrevió a ser diferente, un perfume que trae irreverencia y espectacularidad al mundo de la perfumería artística, recordando el encanto irresistible y la exuberancia de ese período legendario.
Descripción olfactiva del barroco
El barroco se abre con una explosión de naranja dulce y almendra amarga capaz de evocar el alma de Sicilia.
El corazón de la fragancia se revela en un abrazo rico y envuelto donde se mezclan los acentos de mazapán y licor, amplificando la armonía barroca de la composición. Las notas balsámicas de Fava Tonka y el bálsamo de Perú emergen como una obra de arte, dando una profundidad lujosa y suntuosa, casi teatral.
El perfume evoluciona con tonos de fruta confitada, azúcar caramelizada y un toque de café que enciende la imaginación, fusionándose con un toque de almendra que persiste de principio a fin.
En la parte inferior, una mezcla envolvente de musgos afrutados, pachulí y bálsamo del tolù, amplificada por calientes notas ámbar, le da a la fragancia una complejidad sofisticada y una persistencia extraordinaria. Los musgos, los protagonistas silenciosos, dan fluidez y tres dimensionalidad, unificando cada matiz en un entrelazado suave y voluptuoso.
Barroque no es solo un perfume, sino una experiencia olfativa que encarna el exceso, la belleza y el drama del barroco siciliano, trayendo a la perfumería artística una elegancia irreverente. Un sendero que no pasa desapercibido, una sinfonía para los sentidos que te invita a atreverse y distinguirse.