La arena espumosa habla de los tesoros dorados de la arena que le hace cosquillas a los ojos a través de sus granos brillantes. Las huellas del hombre están confundidas con las de los animales pequeños, mientras que la voz susurrante de la naturaleza nos invita a sumergir nuestras manos en esta pequeña obra maestra de perfección. Esta fragancia está dedicada a la calma interna que intentamos cuando tocamos la arena. Incluso si llenamos nuestras manos, no podemos contenerlo y sostenerlo. Al igual que los tesoros más preciosos, podemos verlo, pero nunca lo tenemos.