Los árboles Nobel parecen tener un espíritu y un alma, una energía extraída de la tierra que irradia, consuela y protege. El oud se desarrolla en las damas de estos árboles. Un proceso que se puede comparar con el de una ostra que crea una perla. La rareza de este proceso hace que el OUD sea más caro que el oro. Su perfume es único, rico, profundo e intenso. Debe usarse cuidadosamente y por perfumadores muy experimentados para evitar que prevalezca en las notas de la fragancia con las que se mezcla.
Oud du Jour es una creación magistral, en la que sus numerosos ingredientes se integran perfectamente con la rica oud en un perfume magnífico, suave y soleado. Sigue siendo un compañero hermoso y discreto durante todo el día, sin o abrumador o desapareciendo.